Aunque es en primavera cuando la ordenanza entrará en vigor, el Ayuntamiento ha aprobado de forma provisional una ordenanza que simplifica los trámites para realizar obras menores tales como la renovación de instalaciones eléctricas en hogares, saneamientos o reformas de escasa importancia.
A partir de ahora, la Administración local actuará solamente de verificadora. Hasta ahora, los inspectores municipales acuden primero al lugar donde se va a ejecutar una obra, dar el visto bueno y llevar a cabo otras gestiones burocráticas. Con la modificación normativa, aparecen dos figuras nuevas, la comunicación previa, que es un impreso donde se especifica qué se va a hacer y que una vez entregado en el Consistorio, ya se puede comenzar la actividad y una declaración responsable, donde el responsable de la obra se compromete a llevar a cabo los trabajos declarados y no otros.
Quedan excluidas las actuaciones que requieran proyecto, la reconstrucción de inmuebles en suelo no urbanizable, los edificios protegidos y las zonas de dominio público entre otras.
Personal del Ayuntamiento de Galdakao ha iniciado labores de inspección de obras para comprobar “in situ” que estas intervenciones se ajustan a las solicitudes planteadas previamente en la Administración local y que estas obras disponen de todos los permisos oportunos para llevarlas a cabo.
ResponderEliminarEste trabajo iniciado va paralelo al impulso dado por el Ayuntamiento de Galdakao para eliminar trámites innecesarios en la realización de determinadas obras y actividades urbanísticas. Todo ello con ánimo de simplificar y agilizar la tramitación de los procedimientos que regulan los supuestos de las actuaciones urbanísticas comunicadas.
La aprobación de la nueva normativa para realizar obras menores sin licencia en Galdakao no ha llegado sola. Desde enero, el Ayuntamiento ha realizado medio centenar de inspecciones in situ para comprobar el grado de cumplimiento de los trabajos que se están realizando en viviendas y comercios, además de que dispongan de todos los permisos oportunos. Y los técnicos municipales ya han tenido que paralizar diez reformas que no respondían a los planteamientos registrados en el Consistorio o que incluso se ejecutaban sin licencia.
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